5 razones para preferir el verdadero vintage

Si eres un@ apasionad@ de la industria de la moda, de las prendas únicas que encierran una historia y, además, te preocupa el medioambiente, el universo de la ropa de antaño es tu lugar. Expertos en la materia explican dónde reside la magia del mundo ‘vintage’ y por qué es un lujo.

Desde la década de los 2000, el auge de la estética vintage se ha ido reforzado. Atrás quedaron esos tiempos en los que este tipo de ropa se consideraba simplemente como ‘usada’ (en el peor de los sentidos). Poco a poco se ha ganando el puesto que realmente merece: el de piezas de calidad, exclusivas y con una historia detrás. Parte de este proceso es gracias a la generación ‘millennial’ y ‘Z’ que, ahora más que nunca, apuestan por la ropa de otra época en busca de un estilo único, pero eso sí, más sostenible. La ropa de segunda mano no para de conquistar corazones y expertos del mundo vintage nos descubren por qué amar este tipo de moda y considerarla un lujo :

Son piezas atemporales, únicas y de calidad

No es un secreto, todos sabemos que las prendas de antaño se confeccionaban con el objetivo de durar mucho, muchísimo. No se podía comprar ropa con frecuencia, a diferencia de lo que ocurre ahora, y por eso se invertía tiempo y esfuerzo en crear piezas con telas exquisitas y detalles o acabados artesanales. »El consumo vintage favorece los ideales de moda de hace unos años; calidad y exclusividad. Es un lujo porque ya no se hace. Ni los materiales, ni la mano de obra es la de antes y eso hace que su valor sea incalculable», cuenta Cris pato, dueña de la tienda online con piezas vintage De su padre y de su madre.

Es eco-friendly

La moda vintage da una segunda oportunidad a la ropa, la reutiliza y, como consecuencia, evita nuevas producciones y reduce los residuos. La industria textil en su proceso de ‘fast fashion’ utiliza grandes cantidades de agua y energía y libera numerosas sustancias contaminantes. ‘‘La ropa contribuye al 10% de la huella del carbono global que daña el planeta, se ha producido durante muchos años una cantidad de ropa innecesaria y creo que está en nuestra mano parar esto. Es muy importante por cuestión de ética y sostenibilidad», explica Cristina de De su padre y de su madre.

Contiene mucha historia

Estas prendas tienen un pasado, por eso son únicas. Y no sólo contienen las vivencias de dueños anteriores sino que también como nos cuenta Jorge Vento, propietario de Santo Spirito Vintage: »La ropa Vintage es parte de la historia. Se trata de prendas del pasado que han sobrevivido al paso del tiempo y nos muestran los métodos de confección, el estilo y las tendencias de un periodo determinado. La moda muestra muchos matices socioculturales de una sociedad y viendo la forma en la que se vestía en un periodo concreto, podemos entender que tipo de sociedad existía».

Es más económica

Esta razón nos gusta mucho, no lo vamos a negar, ahorrarse un dinerillo siempre es bien recibido. Y, este ahorro es fácil si sabes dónde y cómo indagar para encontrarte con accesorios y prendas vintage de firmas reconocidas a precios más asequibles que en las colecciones actuales. En ocasiones, comprar vintage de lujo puede ser una inversión. Hay cierto diseños que vuelven con fuerza pasados los años al ‘street style’, como es el caso reciente del Birkin de Hermès o complementos y bolsos de Chanel que se revalorizan.

Un universo de posibilidades para los amantes de la moda

Todo buen amante de esta industria sabrá que poseer una prenda original y diferente que te permita infinidad de posibilidades en tus ‘looks’ es un placer inigualable, un reto creativo. Y este no es el único deleite que causa la ropa vintage en los ‘fashionistas’. A su gran éxito también ha contribuido la exclusividad, el saber que son piezas que nadie más puede comprar, que no habrá dos iguales. La satisfacción de poseer accesorios que contienen historia. Un pequeño homenaje al amor por la moda y su historia.

Para disfrutar del mundo de la ropa de antaño no hace falta que sólo busques marcas de renombre, seguro que si echas un vistacillo al armario de tu abuela encontrarás joyitas que no esperabas.

(Articulo de la revista Elle)